Habría que realizar una línea del tiempo sobre las políticas de trasporte público que se han realizado en Mérida y en Yucatán a lo largo de los últimos 50 años, para poder tener el panorama de las estrategias que se han implementado o que simplemente no se han hecho, así como empalmarlas con el fenómeno de la expansión urbana, para entender que el problema es complejo y al mismo tiempo, identificar con asertividad las causas de este. Y entonces poder determinar entre el IMDUT, el PIMUS Mérida 2040 del IMPLAN y la Dirección de Desarrollo Urbano de Mérida el futuro del transporte público, de las inversiones inmobiliarias y de la calidad de vida de los yucatecos. Sobre este escenario, no habrá cabida de la cómoda frase “No lo vimos venir”.
“Esperamos más de hora y media el camión, aquí en Cholul, y en el paradero de Mérida sólo hay dos camiones sucios, rotos, que cuando llueve se inundan y para rematar el camionero anda a la carrera, es grosero y no acepta las credenciales, es una porquería el servicio”. Estas son las palabras de doña María Caamal, una de las más de cien personas que cerraron el cruce de la calle 21 por 22 del centro Cholul, debido a una protesta de los pobladores que mantuvieron retenidos dos camiones de la ruta Géminis el pasado 30 de diciembre. Ante tal situación, la Dirección de Transporte de Yucatán, la cual pertenece al Instituto de Movilidad y Desarrollo Urbano Territorial (IMDUT) “pidió 15 días para resolver el conflicto”. 1
Este caso es sólo uno de otros tantos que existen en Mérida y el interior del Estado. La movilidad urbana y el servicio del transporte público hoy más que nunca se convierten en los ejes de la competitividad en las ciudades y territorios que pretenden posicionarse como polos para la inversión inmobiliaria. Esto significa que antes de ofertar suelo para el crecimiento inmobiliario, debería de haber las condiciones urbanísticas óptimas para el corto, mediano y largo plazo que garanticen la plusvalía y el buen desarrollo de la ciudad.
La funcionalidad urbana representa uno de los activos más importantes de una ciudad. Cómo se desplazan las personas a través de los medios masivos de transporte, representa uno de los grandes proyectos de infraestructuras que se ponderan y priorizan en los planes de gobierno de las ciudades tienen una visión de largo plazo y alto compromiso social. Pero, además, hay que destacar que apostarles a los sistemas públicos de transporte masivo, no significa ser “populista”, sino ser visionario. Toda vez que cuando estos sistemas son de calidad y cumplen con sus objetivos, permiten que las personas tengan diversas opciones para desplazarse y puedan administrar sus recursos y tiempo de forma asertiva.
Tal es el caso del sistema de transporte público de Seúl, Corea, el cual, desde su reforma en 2004 ha mejorado constantemente las infraestructuras y las instituciones. “En la actualidad, los medios de transporte públicos de Seúl son los medios más representativos de desplazamiento en Corea, ya que se usan por cuatro mil millones de viajeros al año”. Cabe destacar que desde 1960 se han implementado y documentado 45 políticas de transporte en Seúl, las cuales han sido apreciadas a nivel internacional desde los puntos de vista de la comodidad, seguridad, puntualidad y economía. 2
En virtud de lo anterior, sería interesante establecer las vinculaciones entre las direcciones al interior del IMDUT, para determinar de qué manera la Dirección de Transporte tiene relación o injerencia con lo que se trabaja en la de Movilidad, Desarrollo Sustentable y Territorial, y a su vez, cuál es el tipo de vinculación entre las Direcciones de Planeación y Evaluación, Jurídica y Administrativa con la de Transporte. En el entendido de que el problema del transporte en Yucatán no es un ente aislado y toma especial relevancia cuando hablamos de la expansión urbana y de cómo las comisarías próximas a Mérida han sido devoradas por el mercado inmobiliario. Y como consecuencia, la población requiere nuevas propuestas de movilidad que vayan mejorando y transformándose a la par de las autorizaciones inmobiliarias que pasan por la Dirección de Desarrollo Urbano de Mérida.
Asimismo, habría que vincular los esfuerzos que se realizan a través del Instituto Municipal de Planeación (IMPLAN) con su Plan Integral de Movilidad Urbana Sustentable (PIMUS Mérida 2040), el cual establece 6 líneas estratégicas , entre las cuales se precisa el tema del transporte público y la planeación urbana.
Finalmente, habría que realizar una línea del tiempo sobre las políticas de trasporte público que se han realizado en Mérida y en Yucatán a lo largo de los últimos 50 años, para poder tener el panorama de las estrategias que se han implementado o que simplemente no se han hecho, así como empalmarlas con el fenómeno de la expansión urbana, para entender que el problema es complejo y al mismo tiempo, identificar con asertividad las causas de este. Y entonces poder determinar entre el IMDUT, el PIMUS Mérida 2040 del IMPLAN y la Dirección de Desarrollo Urbano de Mérida el futuro del transporte público, de las inversiones inmobiliarias y de la calidad de vida de los yucatecos. Sobre este escenario, no habrá cabida de la cómoda frase “No lo vimos venir”.
Notas:
- https://www.poresto.net/2019/12/31/vecinos-de-cholul-hartos-del-servicio-de-transporte/
- http://isla.merida.gob.mx/serviciosinternet/ordenamientoterritorial/paginas/pimus.phpx
Publicado originalmente en prensa local Por Esto! 6 de enero de 2020