El Mercado Lucas de Gálvez en tiempos carnavalescos
Haciendo honor al Ex gobernador Lucas de Gálvez quien tuvo a bien embellecer a la zona a través de la construcción de “La Alameda” o “Paseo de Las Bonitas”, sería interesante conocer los alcances del nuevo plan de mejora que hoy en día se tiene para invertir un estimado de 200 millones de pesos en la zona de los mercados, para que las intervenciones vayan más allá de sólo remozamientos o cambios de pisos, y sean a su vez acciones vinculantes que atiendan de forma asertiva la promoción turística con la movilidad y seguridad de todos, así como para reforzar el interés que se tiene en el patrimonio histórico, cultural y edificado, que finalmente es nuestra verdadera carta de presentación ante el mundo entero, más allá de las festividades carnavalescas.
En lo que va del año el Mercado Lucas de Gálvez ha sido objeto de diversas notas periodísticas como las que han comunicado el interés de los regidores por conocer las problemáticas de viva voz de los locatarios y usuarios; los intentos fallidos por desalojar a los comerciantes ambulantes; el grado de abandono de sus instalaciones; hasta que finalmente la nota más reciente fue sobre el derrumbe del techo del local de platería “El delfín montado de piedras”, que si bien según el comunicado del Ayuntamiento de Mérida, la Dirección de Protección Civil “respondió de manera inmediata al incidente registrado”, aún queda pendiente presentar una estrategia integral para el mejoramiento y mantenimiento de estos espacios tan importantes para el comercio y la cultura local.
La zona del Mercado Lucas de Gálvez es una de las más ricas en sus antecedentes históricos, desde vestigios prehispánicos, cuyas piedras fueron utilizadas para la construcción del Convento Grande de San Francisco (1566), el cual un siglo después quedo en el interior de la Ciudadela de San Benito (1667). Cuando Lucas de Gálvez fue gobernado de Yucatán en el año de 1791 mandó a embellecer la zona inspirado por las Reformas Borbónicas y se construyó “La Alameda”, también conocida como “El Paseo de las Bonitas” hoy en día la Calle Ancha del Bazar. Cabe señalar que la actividad comercial se empezó a posicionar en la zona desde que se inició la construcción de la muralla de la fortaleza de San Benito.
Fue a mediados del siglo XX cuando se consolida la destrucción de todo este patrimonio, que a su vez había destruido al prehispánico. El camellón del Paseo de las Bonitas pasó a ser ocupado por locales para piñatas y, por tanto, se perdió totalmente la esencia y la idea central que le dio origen a tal visión urbanística de la época.
Por su parte el Mercado Lucas de Gálvez ha tenido tres momentos, el primero cuando se construyó como un gran cobertizo en 1887, para luego dar lugar uno nuevo en 1909, mismo que fue demolido en la década de 1940 para construir el que hoy conocemos. Por lo tanto, estamos hablando de un uso comercial que se ha posicionado en el centro de la ciudad a lo largo de siglos con una gran carga cultural e histórica.
En virtud de lo anterior, resulta fundamental fortalecer una política pública coherente que reconozca al patrimonio histórico, cultural y edificado como lo primordial para diferenciarnos de otras ciudades. Es decir, como parte de una estrategia integral de promoción turística, resulta muy pobre pensar solo en conciertos sin que haya de por medio acciones que a la vez promuevan el acercamiento con la historia viva que aún prevalece en la ciudad.
Invertir en el patrimonio, es invertir en nuestro futuro como sociedad que respeta y reconoce a su gente, historia e identidad. Por su parte, el Mercado Lucas de Gálvez es un gran polo comercial que reúne un estimado de 80 mil personas al día, por lo que requiere de trabajos especiales que consideren además la movilidad y seguridad de tal cantidad de gente, la cual incluye a los comerciantes locales como a los visitantes y turistas.
Por lo tanto, haciendo honor al Ex gobernador Lucas de Gálvez quien tuvo a bien embellecer a la zona a través de la construcción de “La Alameda” o “Paseo de Las Bonitas”, sería interesante conocer los alcances del nuevo plan de mejora que hoy en día se tiene para invertir un estimado de 200 millones de pesos en la zona de los mercados, para que las intervenciones vayan más allá de sólo remozamientos o cambios de pisos, y sean a su vez acciones vinculantes que atiendan de forma asertiva la promoción turística con la movilidad y seguridad de todos, así como para reforzar el interés que se tiene en el patrimonio histórico, cultural y edificado, que finalmente es nuestra verdadera carta de presentación ante el mundo entero, más allá de las festividades carnavalescas.
Publicado originalmente en prensa local Por Esto! 4 de marzo de 2019.